Esta publicación visibiliza como las juventudes cada vez más en su diversidad, son el motor que en la calle resisten: ante la heterosexualidad obligatoria, la tutela de los cuerpos de niñas, adolescentes, mujeres y personas con capacidad de gestar y, ante el extractivismo que contamina y trae muerte.
La memoria y gratitud a les activistas pre y post 1997 hoy en día adultes y adultes mayores opera no solo en lo simbólico. Sino concretamente en que les jóvenes sexo género disidentes hoy seamos titulares de derechos humanos que piensan/sienten en clave interseccional ante las opresiones.
En Ecuador existen mujeres y personas con capacidad de gestar obligadas a maternar forzadamente a través de embarazos producto de violaciones, padres ausentes, y un Estado ciego, sordo y mudo. Es urgente contar con una política pública integral a favor de la educación científica en DDSSRR, el acceso oportuno a métodos anticonceptivos, a planificación familiar con enfoque de género y presupuesto suficientes para su adecuado funcionamiento.
Que como el agua se mantenga la resistencia por los derechos de la naturaleza. Todes como un macizo por la vida digna, la digna rabia. Justicia, verdad y reparación para Samuel Chambers y Andrés Durazno.